Así es el concesionario como espacio de experiencias y no como punto de venta

El sector de la distribución está inmerso en un proceso de reconversión en el que las estrategias tradicionales de venta están dando paso al canal digital y nuevas opciones más originales.

En este sentido, algunas marcas están cambiando su manera de vender coches, llevando sus operaciones a las páginas webs y dedicando los espacios físicos a las experiencias. Un ejemplo de ello es Polestar.

Los automóviles de esta marca son 100% eléctricos, pero su peculiaridad reside en la relación de los comerciales con sus clientes. Las ventas se concretan exclusivamente de forma digital, a través de la plataforma de la marca sueca, lo que hace innecesario contar con un espacio de venta físico.

Sin embargo, los espacios Polestar no están enfocados en la venta, sino que acercan a los interesados en el producto todos los detalles que precisen y lo hacen sin la presión comercial de la venta y con el objetivo principal de asesorar a los clientes. Los especialistas de la marca acompañan a quienes visitan el centro en una ruta de descubrimiento y acercamiento al coche de sus sueños. Los asesores comerciales carecen de comisiones de venta, que siempre se realizan en la web, por lo que el visitante tan solo debe disfrutar de una experiencia casi sensorial.

Comparte si te resulta interesante…

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp
Email

Acceso