El Gobierno ha aprobado la deducción en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del 15% para la compra de un vehículo eléctrico, con una base máxima de deducción de 20.000 euros, lo que implicaría poderse descontar un tope de 3.000 euros.
Para la patronal de la distribución tanto oficial como multimarca GANVAM esta medida es un paso en la buena dirección para avanzar en la electrificación del parque. En este sentido, valora que el Gobierno haya recogido la petición del sector de poner en marcha medidas fiscales que contribuyan a acercar la movilidad cero emisiones a los ciudadanos, en un momento en el que, si bien las ventas de vehículos eléctricos registran una tendencia positiva mes a mes, no alcanzan el volumen suficiente para cumplir el hito de cinco millones de vehículos eléctricos en 2030.
En opinión del director general de Ganvam, Fernando Miguélez, “valoramos la medida por considerar que es un paso más para acelerar la electrificación del parque. No obstante, debe completarse con otras medidas defendidas por Ganvam como la reducción del IVA o el apoyo del usado de hasta 36 meses en el Plan Moves. Son necesarias ayudas directas para reducir el coste de adquisición de estos vehículos y garantizar una transición ecológica justa que no deje fuera de la movilidad eficiente por motivos económicos a grandes capas de la población”.
Cómo serán estas deducciones
Este incentivo fiscal estará recogido en el Real Decreto-ley de apoyo al impacto de la guerra y otras situaciones de vulnerabilidad y, tras su entrada en vigor, se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2024. La medida será susceptible de ampliarse a diciembre de 2025 cuando se dé el visto bueno a la adenda del Plan de Recuperación que el Consejo de Ministros aprobó a principios de este mes de junio.
Además del pago completo, se admiten otras opciones para acceder a la desgravación. Una de ellas es el abono al vendedor de una cantidad a cuenta para la adquisición del vehículo de al menos el 25%. En este caso, la deducción se llevará a cabo en el periodo en el que se abone esa cantidad de anticipo.
Por otor lado, como complemento a las ventajas para la compra del vehículo eléctrico, se fomenta con medidas similares la instalación de puntos de recarga para estos coches. Los particulares podrán acceder a una deducción del 15% en el IRPF si instalan esos puntos enchufables para recargar la batería en un inmueble de su propiedad, siempre que sea antes del 31 de diciembre de 2024 y que ese sistema no esté vinculado a una actividad económica.
