No hay duda de que la crisis del coronavirus ha impulsado los procesos de digitalización. En este contexto, en el que la venta online y el pago por uso ganan cada vez más protagonismo, Ganvam lo tiene claro: la propuesta de valor para captar al cliente ya no será el coche sino los servicios por suscripción asociados a la movilidad conectada (reparaciones en remoto, mantenimientos predictivos, pago por uso, coches por suscripción…).
Su presidente, Raúl Palacios, lleva tiempo diciendo que “esto ya no va de vender coches ni piezas y lo que hay que evitar en esta transición es que el distribuidor se convierta en un mero ‘rider’. Por eso nuestros esfuerzos se orientan a tejer la red que permita a las pymes convertirse en empresas de servicios de movilidad”. Así lo corrobora el informe “El impacto MADE en la venta y la posventa” de Ganvam, en colaboración con Roland Berger, que analiza la movilidad, automatización, digitalización y electrificación: “En apenas diez años, el 67% de los vehículos vendidos se destinarán a servicios de movilidad por suscripción”.
La formación de nuevos perfiles profesionales será clave
Todo este proceso de digitalización está suponiendo también un cambio de aproximación a los compradores, lo que requiere nuevas aptitudes por parte de los distribuidores. De esta necesidad de reconvertir y acreditar los nuevos perfiles profesionales, nace la Academia Ganvam, puesta en marcha por la patronal de la distribución oficial e independiente en colaboración con los especialistas en diseño e implementación de planes de formación para el sector automoción, Infova Automotion.
Según el director de Proyectos de Infova Automotion, Manuel Olivares, “no olvidemos que la formación y capacitación profesional es clave para reforzar la competitividad y la empleabilidad del sector en un contexto como el actual. Con Academia Ganvam contribuimos a cubrir la falta de cualificaciones acreditadas vinculadas a la nueva movilidad conectada y sostenible”.