Cuando acabe el año 2022, se prevé que en los principales corredores viarios de la Península Ibérica, entre España y Portugal, haya un punto de carga para coches eléctricos al menos cada 50 kilómetros, según ha anunciado Repsol.
Y es que, la compañía energética se ha propuesto impulsar una de las mayores redes de recarga pública en toda la Península, a través de un nuevo proyecto que aspira a alcanzar los 1.000 puntos de carga a finales del año 2022.
La inversión anunciada por empresa asciende para ello a 42,5 millones de euros, y culminará con la instalación de hasta 610 puntos nuevos de recarga eléctrica en sus estaciones de servicio de España y Portugal.