Tras Japón y Alemania, Reino Unido se convertirá en el tercer país del en autorizar la conducción autónoma de nivel 3. Al menos así lo ha hecho saber en un reciente comunicado el departamento de transportes del Gobierno británico, en el cual ha confirmado que modificarán su código de circulación para dotar de cobertura legal a los vehículos que equipen estos sistemas, así como a sus conductores y ocupantes.
No obstante, con la intención de garantizar que la circulación automatizada sea lo suficientemente segura, desde la administración inglesa seguirán reclamando que los conductores permanezcan atentos mientras los sistemas autónomos están activos, para poder así retomar el control manual de inmediato cuando sea preciso.
Sin embargo, la reforma incluirá cambios en lo que podrá visualizarse a través de las pantallas multimedia mientras el sistema autónomo esté en uso. Esto último deja la puerta entreabierta a recursos de entretenimiento audiovisual que hasta ahora estaban terminantemente prohibidos en coches, como las películas o los programas de televisión. Lo que seguirá estando prohibido, eso sí, es el uso del móvil al volante, aun con la conducción autónoma activada.
Estas primeras propuestas suponen los embriones de lo que será un marco regulatorio completo, el cual deberá estar listo en 2025 según las previsiones del ejecutivo del primer ministro Boris Johnson.