Entre los métodos más empleados para evitar los excesos de velocidad y mejorara la seguridad vial los radares y los badenes son los más utilizados, pero no son los únicos. Las marcas viales dibujadas en el asfalto también contribuyen a lograr este objetivo, habiendo diferentes maneras de usarlas, como pueden ser las líneas verdes en los laterales de la vía o los dientes de dragón.

En este sentido, un pueblo de Francia ha querido ser más original y apostar por una solución más innovadora. Bauné es una localidad ubicada en la región de Países del Loira y en su ayuntamiento han decidido tomar medidas drásticas para que se respete la normativa de velocidad. Y es que eran muchos los conductores que, en ciertos puntos, circulaban a una velocidad tres veces superior a la legal. No en vano, en Bauné han llegado a interceptar vehículos a 100 km/h en zonas limitadas a 30 km/h.

Es por esta razón que han decidido pintar multitud de líneas blancas onduladas en un cruce clave de la localidad donde coinciden tres carreteras, buscando que esta combinación de rayas propicie que el conductor levante el pie del acelerador.

Según la alcaldesa de la localidad, las marcas viales están funcionando según lo previsto y los usuarios ralentizan el ritmo cuando se aproximan al cruce.