Las esperas más largas que se producen a la hora de llevar le vehículo a pasar la ITV ocurren durante el proceso administrativo previo, cuando el conductor debe entregar la documentación en la recepción de la estación y pagar la inspección. Para evitar estas situaciones nació la ITV digital, la cual se salta este primer paso de entrega de los papeles del vehículo en mano, ahorrando así tiempo y agilizando los procesos.
¿Cómo funciona?
Para pasar la ITV digital es necesario que el conductor pida cita previa en la web de Red Itevelesa o en la aplicación. A continuación, hay que realizar el pago: el precio de este tipo de inspección es el mismo que el de una tradicional, no varía.
Con la cita cerrada, sólo hay que ir a la estación elegida. Allí, para que sea más fácil, estará indicado el camino que deben seguir los vehículos que se hayan decantado por la ITV digital. El conductor tiene que colocarse en la línea designada para pasar la inspección. Aquí tampoco hay cambios respecto a una normal.
El vehículo avanzará hasta entrar a la zona de la revisión, el conductor entregará la documentación al técnico y comenzarán las pruebas. Cuando terminen, le entregarán el informe y la factura: están disponibles en formato físico y también llegarán al correo electrónico que haya facilitado el conductor.
La ITV digital no está disponible aún en todas las estaciones de Red Itevelesa, pero en algunas de las que está, según la compañía, representa un 20% de su actividad diaria.