La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha señalado en el Congreso de los Disputados que el vehículo eléctrico irá abaratándose poco a poco según pasen los años, hasta el punto de que será “accesible” para una gran mayoría en 2035, año que ha marcado oficialmente Europa para el fin de la comercialización de los turismos de combustión.

En respuesta a una intervención del vicepresidente de Vox y diputado en el Congreso, Ortega Smith, la ministra Maroto ha argumentado que hasta 2035 se pretende hacer una transición «ordenada» y que uno de los objetivos más ambiciosos que se plantea para nuestra industria es la de convertirse en el primer fabricante de vehículos eléctricos en Europa, un hecho, que permitirá que se produzca un abaratamiento en el precio de estos.

«Le aseguro que no va a haber ningún problema en el año 2035 para que todos podamos acceder a coches con mejores tecnologías», ha señalado Maroto en su intervención en el Congreso de los Diputados.

¿Y si fuera posible un vehículo eléctrico con autonomía infinita? El proyecto sueco Elonroad asegura que puede llegar a conseguirse gracias a las carreteras, no a las baterías. La idea en la que se basa este proyecto parte del funcionamiento de los circuitos de Scalextric, los cuáles son tramos electrificados en los que los vehículos recuperan energía mientras circulan.

El funcionamiento consiste en desplegar tiras metálicas de un metro de largo en tramos alternos de la carretera. Cada una de estas tiras está electrificada, pero solo generan electricidad cuando hay un coche conectado a ellas. Por el momento, el proyecto Elonroad de carreteras electrificadas se ha desplegado en varios tramos en las ciudades suecas de Lund y Maristad.

Desde Elonroad aseguran que la batería se recarga más rápido que lo que consume el vehículo, con lo que se haría realidad el sueño de la autonomía infinita.

No obstante, la carga no es inalámbrica. Para que los coches recarguen la batería mientras circulan por la carretera tienen que tener instalado un sistema de raíles que se pliegan y que son los que conectan el vehículo con las tiras electrificadas, tal y como ocurre con los coches de Scalextric.